Calentando motores

Apreciados lectores… la cosa empieza a tomar forma…
El pasado sábado 9 de julio decidimos hacer una escapadita a Calella (de Palafrugell, vale Bucky?), para ver como afrontábamos lo de comer y dormir en una cala, a probar el material y, sobretodo, a ver qué puede fallar y qué nos falta aún.
Quedamos para salir sobre las 12’00 horas de Barcelona (13’00 horas desde Llavaneras), pero motivos de fuerza mayor, como el saqueo y el pillaje y la prueba del uketarra, nos llevaron a abandonar la casa de Phoney sobre las 14’30 horas….

1ª conclusión: necesitamos ajustarnos a los horarios.

Una vez tomamos tierra, y después de comprobar los horarios de misa, conquistamos la zona de playa más adecuada para pasar la noche y, Phoney y yo nos permitimos el lujo de tomar un bañito mientras el Capitán y el Coronel se dedicaban a la pesca…. Después de no recuerdo si 20 minutos o una hora y media, nuestros hunters emergían del agua con sus trajes de neopreno puestos y un pulpo en su red… Esa noche cenamos pulpo a la gallega con patatas (compradas, no pescadas, por supuesto…)

2ª conclusión: parece ser que no pasaremos hambre. 

Durante la sobremesa, ya saboreando el 'rom cremat', empezamos a dudar de si estábamos realmente en Calella o habíamos acabado en las ramblas de Barcelona… estábamos rodeados… desde parejas, hasta familias, todos ellos con sus tiendas, con la intención de acompañarnos en nuestra acampada. Pero lo peor estaba por llegar….
Más o menos a la vez, irrumpieron, haciéndose notar, los mosquitos y una pandilla de hormonas dentro de unos cuerpos de adolescentes, pero ahora no recuerdo cuales eran más molestos… los chic@s eran unos 30, con un aparato de música que se oiría desde la luna y unos gustos musicales que dejaban mucho que desear… tres de nosotros maldijimos el rato que consideramos necesario mientras se nos ocurrían varias cosas que hacer con ese trasto musical… sólo Phoney se mantuvo impertérrito y consiguió descansar un poco…

3ª conclusión: no zarpamos a ses Illes sin una mosquitera, a poder ser, insonorizada…

Y atardeció y amaneció…

Nos levantamos con cuerpo de apenas haber dormido, alguno con cara de haber discutido con los mosquitos y levantamos el “campamento” (todo cumplió su función a la perfección); para entonces, las hormonas estaban ya cansadas y recogidas en unos sacos, pero eso no nos privó de maldecir un poco más…
Desayuno ‘frugal’, misa (con consiguiente cabezadita involuntaria durante el sermón, por lo menos por mi parte) y vuelta al lugar de acampada, para disfrutar de un día de playa merecido después del éxito de la empresa…

Durante la vuelta a casa hubo sesión continua de risas tontas provocadas por el cansancio… divertido, pero no podemos permitírnoslas durante nuestro periplo…

4ª conclusión: tenemos menos de 3 semanas para prepararnos físicamente.

Queridos lectores… la cosa pinta bien, pero no será fácil…

Os mantendremos informados.